En diciembre del año 2006, Chile Transparente inició un proyecto educativo para promover la formación valórica y ciudadana en niños y niñas de enseñanza básica. El objetivo fue generar recursos de aprendizaje ajustados a los planes y programas exigidos por el Ministerio de Educación chileno.
Durante los años 2007 a 2009, se crearon materiales educativos que consideraron experiencias, discursos e intereses lúdicos de los estudiantes. A fin de validarlos pedagógica y conceptualmente; fueron probados en escuelas de Maipú, Pudahuel, Estación Central, Cerro Navia y Quilicura. Durante el año 2010, se realizó una implementación piloto con 1.600 estudiantes de Lo Prado, Pedro Aguirre Cerda y Estación Central, obteniendo mejoras significativas en aprendizajes curriculares obligatorios y en la promoción de valores ciudadanos asociados a transparencia, tales como honestidad, justicia, responsabilidad, convivencia, bien común, transparencia y probidad.
El programa asume el desafío de ahondar en estos principios, a través de materiales didácticos dirigidos a estudiantes de educación básica, los cuales apoyan la labor docente, ya que incluyen aprendizajes esperados de Historia y Lenguaje. Asimismo, desarrollan habilidades como argumentar, analizar, transferir, organizar y comunicar ideas, entre otras competencias que evalúan las pruebas estandarizadas. Permiten autonomía en el aprendizaje y propician mejoras en la convivencia escolar.
Durante el año 2011 se socializó la propuesta en seminarios, congresos y reuniones de expertos. Gracias a los resultados de implementación y evaluación, se logró la firma de un Convenio con el Ministerio de Educación, que ha implicado un trabajo de reedición, contextualización curricular.
Durante el año 2012, se espera la distribución e implementación de 4 materiales didácticos de 5º a 8º básico en 1.500 Liceos a lo largo del país. Se proyecta además, la creación de nuevos soportes lúdicos dirigidos a niños y niñas de pre-kínder, kínder, 1º y 2º básico.
Este proyecto cuenta con patrocinio de UNESCO y del Ministerio de Educación y ha sido financiado por donaciones de empresas y del BID Japón.
