Señor Director:
En diferentes encuestas de opinión que consultan sobre el pago de sobornos, nuestro país aparece con números relativamente bajos, especialmente si lo comparamos con otros países de la región. En Chile generalmente menos del 20% de los encuestados declara conocer la ocurrencia de este tipo de actos. Lo que no significa que este tipo de hechos no ocurran, sino que se darían en una frecuencia menor.
Para seguir con esta tendencia y en lo posible disminuirla, es fundamental que la sociedad esté atenta y reaccione de forma inmediata y clara cuando casos como estos los involucren o lleguen a su conocimiento.
En los últimos días, han aparecido en los medios de comunicación noticias acerca de que ciertas universidades habrían pagado al ex presidente de la CNA supuestos sobornos para obtener su acreditación. También se ha publicado respecto a cambios de personas ante una infracción de transito y hasta de la entrega de camisetas a funcionarios policiales por parte de un director técnico, lo que está en etapa de investigación. Lo cierto es que durante este año se han encendido varias luces amarillas y alarmas que dan cuenta de actos de falta de probidad por parte de funcionarios públicos.
Conociendo el contexto actual en nuestro país, donde los niveles de confianza intrapersonal y con respecto a las instituciones presentan niveles muy bajos de aprobación, se hace fundamental reaccionar a tiempo y no tolerar dichas prácticas.
Por esta razón, llamamos a la ciudadanía a denunciar y condenar estos actos, puesto que la corrupción es el arma más poderosa para erosionar la confianza pública y la convivencia democrática.
Gonzalo Delaveau S.
Presidente Chile Transparente
Capítulo Chileno de Transparencia Internacional